Colaboradores de la locura

miércoles, 22 de febrero de 2012

Todo.

Supongo que todo podría ser tenerte a mi lado las 24h del día. Que siempre que me despertara estuvieras a mi lado en  la cama. Que pase lo que pase, siempre estarías a mi lado, animándome y sacándome siempre una gran sonrisa, por muy mal que esté.
Supongo que tenerlo todo sería poder lograr todos mis sueños. Demostrarle al mundo que si quiero, puedo. Sería tener todo lo que quiero, pero sólo lo que necesito de verdad.
Sería todo lo posible por poder ayudar al mundo, a todos esos niños que no son capaces de sonreír a pesar de sus pésimas condiciones de vida. Sería, poder hacer sonreír a todas las personas, costase lo que me costase, con tonterías o sin ellas, animando, estando ahí cuando más lo necesiten.

Sonríe.

Por todos los buenos momentos vividos. Por todas y cada una de las veces que has mostrado tu hermosa sonrisa a el mundo. Por todos esos lugares que, junto a los recuerdos, te han hecho sonreír.
Porque con una sonrisa en la cara, siempre es mucho más fácil seguir con el día a día. Porque lo que más le duele a quien más te odia es que sonrías. Porque tu sonrisa enamora, y tu personalidad, aún mucho más.
Porque sabes que sonriendo, le puedes alegrar la vida a muchas personas. Porque simplemente, tienes que hacerle saber a el mundo lo feliz que eres, y lo poco que te afectan los problemas.


¿Y es que no recuerdas todos esos momentos vividos? ¿Esos momentos en los que los dos éramos solo uno?
¿Todos esos momentos en los que te hacía sonreír con cualquiera de mis tonterías? Esos momentos en los que lo dabas todo por llegar a estar a mi lado. Esos momentos en los que yo, era feliz.




miércoles, 8 de febrero de 2012

Mira a la vida.

Tener sólo un pequeño apoyo en el que poder sujetarte. Que algunas personas te intenten ayudar, pero que sólo lo consigan 2 o 3 de ellas. Pero que siempre estén las demás personas de el lugar en el que vives machacándote siempre con cosas que saben que te joden, que te molestan y que no soportas.
Te das cuenta de que la mayoría de las personas se dedican a meterse en tu vida y jodértela como puedan, de una manera o de otra, les da igual, con tal de que consigan lo que se proponen.
Pasar de ellos... Sería lo mejor, pero no es nada fácil, al contrario, cuesta, y mucho. Pero es lo mejor que podríamos hacer para nosotros mismos. Pasar de todo, durante un par de días, para así, poder despejarte, sentirte mejor, aliviado...
Es mirar al cielo y echar un suspiro. Es mirarte a los ojos y reflejarme en ellos. Es escuchar los comentarios que se dicen por ahí y callarme todo lo que respondería sobre ellos. Es, en definitiva, mirar a la vida y sonreirla, porque no queda más remedio, y así, seguir hacia adelante con tu día a día.

Tal vez, tal y como es.

Tal vez ahora mismo no esté bien, o tal vez sí. Tal vez yo piense que todo es una mierda, que no vale nada nadie, o tal vez piense que todo es maravilloso, que todo lo que me rodea vale mucho, incluso, demasiado. Tal vez esto que escribo sea para desahogarme, o tal vez no. Todos, absolutamente todos, hemos hecho y hemos dejado de hacer cosas por la simple respuesta de "tal vez". Porque todos, hemos tenido nuestros días geniales y nuestros momentos de bajón. Por mucho que la gente diga "déjales, pasa de todo lo que te digan" no es fácil hacerlo, ya que queramos o no, vivimos en sociedad, no en un mundo en el que sólo existes tú. Sí, yo también le digo eso a las personas que me importan cuando están mal. Y sé que es difícil de conseguir, porque, como ya he dicho, todos tenemos nuestros momentos de bajones, en los que se nos junta todo y no podemos hacer otra cosa que llorar o pegarle a algo para poder desahogarnos.
Puede que esto te parezca una tontería, una pérdida de tiempo, pero es que es así, puede que te pienses que no te afecta nada, que eres de piedra, que siempre saldrás a delante sin ninguna herida. Eso es imposible, no eres de piedra, ni nunca lo serás, lo sabes, es así. Que ahora estás bien y no te afecta casi nada, me alegra que estés así. Pero no te mentiré ni te daré la razón a lo tonto. Tú mismo/a sabes que esa felicidad no te va a durar para siempre, que antes o después, todo se irá a la mierda, y como ya ha pasado antes, caerás al suelo y lo único que harás será pensar en todas esas cosas del pasado que, hasta hacía nada, te habían echo feliz. Que con un simple movimiento, sentimiento, pensamiento, mirada, o simplemente de la noche a la mañana, todo eso que te hacía feliz, se vuelva a tu contra, para pasar de ser la causa de tus sonrisas, a la de tus lágrimas. Todo, absolutamente todo, tiene su fin, por muy interminable que parezca ser. Por muy bonito que parezca, no es tanto como debería, tal vez eso que crees que es demasiado para ti, no sea ni la mitad de lo que te mereces. Porque uno no sabe lo que vale, hasta que alguien que de verdad vale la pena, se lo demuestra.