Colaboradores de la locura

miércoles, 27 de junio de 2012

Puede que pienses que ya todo ha terminado.

Ya nada volverá a ser como antes, te dices a ti misma. No volveré a conseguir todo lo que tengo por mucho que me proponga en la vida, es imposible. Día a día, sabes que todo se está acabando y que, de un momento para el otro, cuando menos te lo esperes, desaparecerás del lugar en el que te sitúas ahora mismo.
Puede que esas sonrisas diarias ya no pertenezcan a las mismas caras, pero sin la menor duda, esas sonrisas que, a partir de este momento escasearán, siempre quedarán en el recuerdo, y cuando más las necesites sólo tendrás que imaginártelas, porque ahí siempre permanecerán.
Pensarás que es un adiós definitivo, pero más de una persona te puede asegurar que esto no es así, que cuando menos te lo esperes, cuando mejor te lo estés pasando y cuando ya estés adaptada a todo lo nuevo, regresarás y aquí estaremos todos, con los brazos abiertos más que nunca, con esas ganas de poder volverte a abrazar y poder volver a verte sonreír como hacíamos todos los días. 
Nos volverás a iluminar con tu preciosa sonrisa y contarás todas las cosas diferentes que existen en un lugar tampoco tan lejano.
Pronto, muy pronto, estaremos de nuevo en el mismo sitio, con las mismas personas de siempre. Recordando y pasándolo en grande una vez más.